Se trata de una colección de auténticas princesas que brillan con luz propia, con siluetas ultrafemeninas.
Alberto Balestra, experto en diseño, se ha dado a la tarea de destacar el lado más sensual de las mujeres con vaporosos vestidos largos y otros de corte recto, pero todos bajo un mismo concepto: elegancia, creando siluetas más estilizadas, delgadas y aerodinámicas.
La paleta de colores suntuosos va desde los plateados, pasando por azules, plomos claros y negros, marcados por brillos y cristales, sin dejar de lado los estampados.
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