Mientras se ultimaban detalles en el escenario preparado para la 16 edición de los Grammy Latinos, en Las Vegas (EEUU), en el Grand Garden Arena comenzaba la alfombra roja, donde las estrellas de la premiación desfilaron con sus mejores vestimentas.
La gala mostró como anfitrión el negro, tanto en los trajes masculinos combinados con la clásica camisa blanca o con una negra, como en los trajes largos y entallados de las divas. Ellas eligieron faldas amplias o tipo “lápiz”, pero siempre mostrando mucha piel. Infaltable, los escotes que dejaron poco o nada a la imaginación. El destello lo pusieron los brillos y las tachas como adornos sencillos en vestidos bien elaborados para el evento de la Academia Latina.
Esa noche, no faltaron los irreverentes que con zapatillas y camisetas se pasearon por la alfombra roja. Ya dentro del teatro, en el escenario o en la platea, los artistas querían verse los unos a los otros. Ahí estuvieron el trío leonés Café Quijano y la actriz Zoe Saldaña, a quienes les dieron un visto bueno por su atuendo.
También asistió quien hiciera del acordeón su marca musical, componiendo temas como Limón y sal o la más reciente Buenas noches, desolación, Julieta Venegas, que por cierto estuvo en la lista de las peor vestidas. La artista confesó a EFE que tenía “ganas de ver a Natalia Lafourcade actuar en directo”. Sin duda, esta vitrina de la moda tiene propuestas para todo gusto, hay para quienes gustan de lo clásico y también para los que prefieren la comodidad o bien, lo atrevido.
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