Nuestro idilio con los colores varía cada ciertos meses. Cada seis, de temporada en temporada de la moda; o cada año, cuando Pantone apuesta por el tono que lo pintará todo durante los siguientes 365 días. Así nos enamoramos del Marsala, el Orquídea Radiante o el Greenery (ese verde al que poca salida podíamos dar en el armario), y del rosa, el amarillo y el rojo por dictado de las pasarelas. Y, ahora, un nuevo amor: el malva, la tonalidad más pastel del morado viene con fuerza y tiñe prendas de todos los ámbitos para vestir de color tus días de cabeza a pies.
En las pasarelas de febrero, el malva se dejó ver algo tímidamente en las propuestas de Hermès, Lacoste, Chloé o Marques’Almeida. Y en Gucci, claro, pues este es uno de los colores favoritos de Alessandro Michele, sin miedo a mezclarlo con otros tonos como el verde, el rojo, el amarillo o el rosa. Pero esto era solo un adelanto: al llegar septiembre, las firmas, como si se hubieran puesto de acuerdo, dijeron al mundo que, en efecto, el malva era el color al que debíamos mirar con la llegada de 2018, bañando los diseños de Salvatore Ferragamo, Stella McCartney, Valentino, Victoria Beckham, Rochas, Rosie Assoulin, Y/ Project o Michael Kors, entre otros.
Así, el malva (en algún lugar difícil de clasificar entre el lila, el lavanda y el violeta), con una tonalidad más azulada que el rosa pastel, toma el relevo de este último en el uniforme femenino y se deja ver en los jerséis de punto más apetecibles de Mango y & Other Stories, en el invierno de Ganni o tintando el pelo falso que vive su gran auge esta temporada, como sucede en el caso de Miu Miu. En Instagram, influencers españolas como Nurla Val (@freklesnur) o María Bernad (@maria_bernad) ya han puesto sus principios básicos en práctica, adelantándose a la ola cromática que este color va a suponer durante el próximo año. ¿Te atreves con él?
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