Los centros comerciales del siglo XXI por fin dirán adiós a los probadores repletos, con largas esperas y luces de neón que generan resultados a menudo desmoralizadores.
La revolución llegará de la mano de un espejo que prueba los vestidos en lugar del cliente: se trata de un sistema de realidad virtual para comercio electrónico, que da a los usuarios la posibilidad de probarse ropa y cosméticos gracias a una imagen tridimensional de sí mismos.
Inventado por Apache Technologies, el “espejo mágico” permite probarse ropa sin desvestirse y funciona gracias a una tecnología que transforma los movimientos del cuerpo humano en comandos para un dispositivo electrónico.
Con el agregado de una webcam y una pantalla a tamaño humano que funciona como espejo, el sistema de simulación tridimensional permite probarse y combinar, de modo virtual y en tiempo real, ropa, cosméticos y accesorios.
Lo único que debe hacer el consumidor es posar frente al exhibidor, teniendo en la mano la prenda deseada. En todo lo demás piensan la computadora y la microcámara incorporada, que escanean la contextura del cliente para llegar, en pocos instantes, a la elaboración de una imagen virtual y la secuencia de prueba de la ropa.
Actuando sobre los diversos comandos y botones del “espejo mágico” se puede cambiar el talle y color del modelo elegido, viendo de este modo todas las variantes de la prenda original. Un simple movimiento del brazo es suficiente para desvertirse, descartar una prenda y probarse otra.
Con otro rápido gesto de la mano la ropa es enviada a la caja, y lo único que queda es pagarla. El “espejo mágico” será inaugurado en el centro comercial Trafford de Manchester, cuya gerente lo describió como “una revolución” que cambiará completamente el modo tradicional de comprar.
“Te permite probar gran número de vestidos en poco tiempo”, explicó Kelly Da Silva Fernandes al Daily Mail. “Es muy divertido también como experiencia, sobre todo si estás con un grupo de amigas”, agregó.
Caroline Aikman, directora de marketing del Trafford Center, dijo que “ésta es nuestra arma secreta para contrarrestar el aumento de las compras por internet. No se puede tener esta experiencia en línea”.
Con tecnología 3D, el espejo superpone las prendas a una imagen “en vivo” del cuerpo.
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