Efectivamente, un accesorio es un complemento al estilo personal y a la elegancia de cada persona; además, los accesorios nos llegan muchas veces a simplificar nuestras vidas, pues nos ahorran tiempo y dinero. Sin embargo, lucirlos es también un arte de conocimiento. Sean pulseras, pañuelos, cinturones, sombreros, pendientes, anillos, gafas, y hasta pestañas postizas y extensiones, debemos lucirlos considerando los siguientes aspectos de etiqueta.
1.Sencillez. Mientras menos mejor o mientras menos más.
2.Balance. Encuentra el balance para lucir un accesorio. Como ejemplo, un cinturón que haga juego con los zapatos o cartera, pero que siempre exista un equilibrio con las prendas.
3.Colores. Los accesorios ayudan a balancear los colores; si tienes puesta una prenda de color intenso, un accesorio de color neutral puede reducir la intensidad o viceversa, una simple prenda de color entero puede lucir más interesante con un accesorio de colores. Trata de evitar los brillos a menos que sean delicadamente seleccionados.
4.Armonía. Luce los accesorios de forma que vayan armoniosamente con tu tenida y escoge bien tu accesorio de acuerdo a las características de tu cuerpo y a tu apariencia.
5.Características propias. Debes tener en cuenta también las características de tu cuerpo hasta el tipo de peinado. Para citar algunos ejemplos, si eres una persona baja de estatura no te favorecen los accesorios largos, ni los aretes que cuelguen demasiado; si tienes los brazos cortos, no vayas a utilizar pulseras gruesas; si tienes el cuello corto, opta por lucir un collar largo para añadir efecto en el largo del cuello.
6.Magnitud del evento. Ten en cuenta, asimismo, cuán importante o grande sea el evento al que vayas a asistir. Por ejemplo, en una boda no podrás lucir accesorios muy vistosos ni demasiado llamativos como para opacar a la novia, así que escógelos bien. Lo mismo si vas a asistir a un evento deportivo, no puedes lucir perlas o cristales, o algún accesorio elegante, no es prudente.
7.Tipo de ocasión. Los accesorios deben ser llevados dependiendo de la ocasión y el lugar y a veces hasta el clima. Seguramente utilizarás broches o aretes sencillos en la oficina todos los días y, por el contrario, llevarás pendientes más grandes o colgantes a una fiesta.
8.Textura. Al igual que el color y el estilo, la textura debe ser estimada. Por ejemplo, un bolso fino de cuero, o de tela con finos relieves, o gamuza cuyas texturas hacen sentir la diferencia.
9. Ejemplos de accesorios que no guardan armonía. Hay muchísimos, pero algunos que vale la pena citar, que no dejan de llamar mi atención:
- Más de un arete en cada oreja.
- Pañuelos sobre una camisa con cuello, uno de los dos, nunca los dos.
- Collar largo sobre una blusa con bolados, cargada combinación.
- Pestañas postizas que se ven muy falsas y exageradas; es mejor lo natural.
- Collar de perlas largo en una blusa de corte en “V”, es preferible uno corto.
- Extensiones de cabello artificiales que nada tienen que ver con un cabello fino natural.
- Más de tres accesorios en una sola vez desmereciendo la tenida.
ACCESORIOS PARA LOS VARONES
La corbata es tu herramienta más poderosa porque muestra tu personalidad; escógela muy bien. Un reloj, otro accesorio que casi siempre se mide por el tamaño o forma de la cara; si la estructura ósea de la cara es más o menos grande, puedes lucir un poderoso reloj. Los cinturones, que siempre sean de la mejor calidad, así como los zapatos, pues te durarán mucho tiempo.
Así, vemos que ningún look está completo sin un accesorio. Un accesorio puede ser el último toque a una prenda de vestir; puede ser tu aliado, pero siempre llevado con gracia, elegancia y distinción. Hago cita al ícono de la moda, Yves Saint Laurent: “La moda pasa, el estilo es eterno”. ¡Luce tus accesorios con todo estilo!
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