Las películas “Birdman” y “Gran Hotel Budapest” se convirtieron en las grandes triunfadoras de la 87ª edición de los premios Óscar, con cuatro estatuillas cada una.
La primera, producción cinematográfica del mexicano Alejandro González Iñárritu, ganó en las categorías más importantes: Mejor película, Mejor director, Mejor guion original y Mejor fotografía.
Mientras que la segunda, “Gran Hotel Budapest”, se hizo con los galardones de Mejor diseño de vestuario, Mejor maquillaje, Mejor banda sonora original y Mejor diseño de producción.
La 87 entrega anual de premios Óscar, organizada por la Academia de Ciencias y Artes Cinematográficas (AMPAS por sus siglas en inglés), fue celebrada el pasado domingo en el Dolby Theatre de Hollywood de Los Ángeles, donde concurrieron al menos 3 mil invitados.
Entre ellos Jennifer Aniston, Lady Gaga, Jennifer López, Scarlett Johansson, Matthew McConaughey, Eddie Murphy, entre otros.
LOS SEÑALADOS De forma previa a la gala de premiación, los asistentes se pasearon por una alfombra roja de más de 152 metros de largo. En su trayecto algunos irradiaron glamour, mientras que otros fueron calificados como “mal vestidos”.
Una de las primeras estrellas en llegar al evento fue America Ferrera (de la película “Cómo entrenar a tu dragón” 2), quien lució un vestido de Jenny Packham y llevó el cabello suelto y ondulado. Tras ella, llegó Dakota Johnson (protagonista de "50 sombras de Grey”) con un vestido rojo de Saint Laurent que tenía una larga abertura en la pierna. Ambas irradiaron glamour a su paso, a diferencia, por ejemplo de Lady Gaga.
La cantante optó por un vestido blanco, parecido al de Úrsula de la sirenita, según las redes sociales, y unos guantes rojos “parecidos a los que se usan para lavar trastes”.
Al igual que Gaga, muchas invitadas apostaron por las tonalidades más claras de la paleta para desfilar por la alfombra roja.
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